lunes, 3 de julio de 2023

Curioso caso de dos mentes perdidas (Relato Body swap, Anuncio)

Hace poco había publicado una historia junto a un anuncio… dije que pronto subiría un relato con body swap y pues, creo que 2 años aun siguen pareciendo pronto para algunos. Nah para nada, sinceramente pase por mucho durante este tiempo, entre estas cosas puedo decir que me costo bastante poder escribir algo que me convenciera realmente como un cuento que de verdad me gustara, sinceramente creo que fue mejor así, tuve algunos borradores que no solo no me gustaban… me parecían un poco cliché y al menos desde que me empecé a tomar enserio la escritura decidí que no quería eso para lo que escribía, digo, realmente no me disgustan estas historias que son solo un tipo poseyendo a alguien y terminando con desenlaces sexuales, pero yo quería algo mas para mis historias. Sinceramente si tuve algunas cosas para publicar durante este tiempo, pero me sentía mal al haber prometido un cuento de body swap y no traer nada durante tanto tiempo. Como sea, al final me pude iluminar y termine al fin este relato que me costó tanto traer, incluso después de un bloqueo artístico tan horrendo como el que eh vivido el ultimo año... añadiendo el hecho de que finalmente pude entrar a una universidad y ahora ya no dispongo del tiempo de antes.

Como se aquí está el cuento y pienso seguir escribiendo, probablemente también cambie la dirección de URL que tiene el blog, cuando estaba en secundaria lo hice como una broma, pero ahora me da un poco de pena tenerlo jaja, en fin, intentare seguir escribiendo seguido, tal vez hasta otros cuentos de body swap, aun que tal vez tarden un poco. Un poco para mí mismo me gustaría innovar en el género así que por eso sea que tarde en escribirlos, al menos las ideas aun las tengo, así que tarde o temprano tendrán también relatos de body swap, aunque también habrá otros variados, tal vez hasta recomendaciones o no sé, ya veré con el tiempo… en fin, para terminar, supongo que reviví de entre los muertos y ahora espero poder escribir seguido, eso sí, no esperen publicaciones diarias o semanales, si algo eh aprendido con el tiempo es que las buenas historias requieren tiempo y mucha paciencia, leyendo otros blogs me di cuenta que hubo algunas peleas entre la comunidad pero meh, al final creo que solo fue cosa de personas que les gusta picar crestas para molestar a otros :b. les agradezco a los que hayan leído esto y los dejo con el cuento XD tenia que decir esto antes de volver a publicar.

Pd. Estaba pensando en hacer comisiones para con los relatos, si les interesa pueden comentarlo o mandar un mensaje, me interesaría saber su opinión sobre eso :b




Deje de pensar por un rato aquella noche, mis ojos se cerraron y mi cuerpo estaba agotado. Solo fue por un rato. No tuve ningún sueño, tampoco recordé nada que ocurriera en la noche, tan solo abrí mis ojos. Miraba el techo tan de pronto que parecía un sueño, cada que cerraba mis ojos podía ver mis parpados; tan consiente en ese momento. Tal vez solo me parecía similar; pero no estaba ahí, no me reconocí a mí mismo, era como tener un sueño profundo, me parecía diferente, recordaba que había puesto una lámpara de alado de mi cama y otra enfrente mío, luces que se encenderían cuando diera la hora de trabajar, todo al tiempo en que sonaba la alarma, pero la alarma no había sonado, tampoco las luces se habían encendido. Alado mío una ventana me iluminaba por el sol, los rayos me golpeaban el rostro y me hacían sentir una extraña sensación en mi piel. No comprendía lo que pasaba, me sentía como enfermo; más débil de lo normal… —por describirlo de una manera— aun que, también me sentía con energía, quería saltar de esa cama y correr toda una cuadra hasta alcanzar mi meta diaria, como si fuera una especie de rutina… no me parecía que era algo que yo haría. Me levanté alarmado cuando mi teléfono sonó; no me reconocía al moverme, mi cabello era largo y lacio… no me incomodaba para nada, me mantuve un momento mientras pensaba en mi mismo al tiempo en el que me miraba en un espejo que no había, estaba ahí, viéndome, si acaso “¿era yo?”. Pensé en mis sentidos, me desconocían, cada parte de mi cuerpo deslumbraba un aire extraño y deslumbrante al que no estaba acostumbrado.

Me inquieté de repente, seguí mirando mi rostro mientras acercaba mis dedos para rosar mi piel, mi rostro era frágil y limpio, nada propio de mi. Era difícil de describirlo, pero; era tan diferente. Mire hacia abajo, había un par de bultos que no recordaba, acerque mis manos para tocarlos, lo hacía con delicadeza, me sentía como un invasor, no sabía por qué. Voltee al espejo de nuevo, esos ojos tan grandes mirándome me hacían sentir culpa sin entenderla, no me sentía yo, sabía que estaba ahí, que era yo la que veía, pero era sin ser, extraña en mi misma.

Me acerque más al espejo, quería verme mejor, pensaba en la noche anterior, un tipo extraño en esa fiesta había intentado hablarme, no parecía tan malo… no estaba en mis cinco sentidos, talvez, incluso creo… que podría equivocarme al pensar en ese tipo como alguien guapo, no lo sé exactamente, estaba segura de que me había drogado, no parecía tan malo… pero, no. Seguramente me había tomado. Solo recuerdo haber llegado en la madrugada. El haberme recostado. Luego llorar hasta dormir.  Pero parecía difuso… no creo que fuera real. Volví a ver mi reflejo en el espejo, era yo, pero sin serlo, mis memorias no parecían ser las mías, comencé a llorar de nuevo. Me estaba mirando a mi misma pero no estaba ahí, no era yo. Tome el tocador desde atrás con todas mis fuerzas y lo arroje al suelo. Me sentía tan débil. Los vidrios rotos alrededor de suelo, la madera rota por su propio peso. Tome mi cabello jalándolo con fuerza, estaba desesperada, ansiosa, tan enérgica y confundida. Corrí al baño saltando los cristales rojos en el suelo… y todas esas astillas sueltas de ese mueble, apenas si podía pasar.

En el baño volví a verme en el espejo, el tocador estaba frente a la puerta. Primero estaba esa imagen, ese rostro de frágil porcelana enfrente mío, tan desconocido para mí. Me acerque un poco más, era yo.

Me mire, estaba harta de verme, me quite el camisón que traía puesto y casi desnuda, parecía extrañamente familiar esa imagen, no tenia sostén, solamente una tanga rosa. Sostuve mis pechos mientras me veía enfrente de ese espejo, me sentía linda viéndome tan al descubierto, la figura que me recorría, como las curvas de una serpiente al enrollarse a sí misma. Pase mis manos por todo mi cuerpo, baje desde mis pechos hasta mis largas piernas, si acaso parecía un sueño, en mi mente era real.

Mis manos me tomaron como si fueran ajenas y cada parte de mi cuerpo me parecía nueva. Me acerque a la ducha que estaba a mi derecha, abrí el agua caliente y comencé a bañarme, el agua recorriendo mi cuerpo parecía nueva, tan diferente a lo que recordaba, mis dedos rosaban mis labios intentando morderlos, mi otra mano toca mi clítoris, jugaba con él mientras gemía con el roce mis yemas, una y otra vez, no dejaba de hacerlo, mis piernas se vencían mientras pensaba en mi misma, esa idea se plantaba en mi cabeza con cada gemido, y esa pregunta no se iba “¿Quién soy?”; conocía ambos nombres, pero ninguno era mío, no era ninguna de esa dos personas, era como una sombra de aquello que parecía era. Me detuve un momento. Un poco antes del clímax, sabía que era mi límite, pero no llegue ahí. Cerré ambas llaves y de paso mis piernas. No podía dejar de pensar ahora mismo en esa pregunta, podría afirmar sobre mi misma pero seguramente no llegaría a nada.

Salí de la ducha, tomé mi bata y fui de nuevo hasta la cama. Me subí en ella y me senté abrazando mis piernas, seguramente nadie sabría la diferencia entre yo y mi antiguo yo, pero tampoco estaba segura de por qué era así, ella estaba en mi cabeza, el también. Pensé en mi misma, sabía que no existía alguien antes de esto a quien pueda llamar yo, abrace con más fuerza mis piernas, me ofusque con mis propios pensamientos, la idea me estaba superando.

Abrí mi cajón para poder ver las cosas que ahí guardaba. Había una libreta que estaba llena de dibujos y algunas cosas extrañas, las recordaba, había una fecha que se marcaba mas entre todas las paginas, sabía que había pasado en ella, no me ayudaba mucho a diferenciarme de ella, incluso podría decir que me parecía más difícil llamarme por su nombre. Lance el diario a la misma pared en donde estaba el tocador, luego patee el buró junto a mi cama, cayo en seco, el ruido resonó en toda la habitación; el departamento era pequeño, alguien seguramente debió de oír el desastre. Suspire pensando en que alguien vendría buscando respuestas, me sentía frustrada por tener que lidiar con ellos por algo tan absurdo, seguro que alguien sabría lo que estaría pasando. Me levante de la cama camino a la ventana, mire hacia ella creyendo que el cielo me daría la respuesta ¿si acaso al hombre que se le ocurrió esta broma pensaría en las consecuencias de sus actos? ¿También pensó en la persona que nacería de esto?, no entendía la razón, recordaba todo mientras veía el cielo, no estaba limpia, el tampoco era un santo, podría pensar en que ambos me hacen víctima de sus pensamientos, pero no era culpa de ninguno de los dos, tan solo era una consecuencia de sus traumas, de sus pensamientos y de sus memorias, era un error.

Deje caer la bata y mis pechos quedaron al aire, mirando conmigo al cielo, no tenía sentido, yo no tenía sentido, me acerque demasiado a la orilla del palco, mire hacia abajo. No estaba tan alto. Suspire y pensé que tan rápido podría caer.

Henri Matisse-- Mujer en la ventana
Henri Matisse-- Mujer en la ventana





No hay comentarios.:

Publicar un comentario